Nuestra trayectoria
La Repostería de Pi nace del deseo personal de transformar una pasión en un proyecto profesional. Todo comenzó con las recetas familiares que despertaron el interés por la repostería, y que con el tiempo se fueron enriqueciendo gracias a nuestra formación.
Desde entonces, el obrador se ha consolidado como un espacio donde cada elaboración se trabaja con precisión, adaptándose a los gustos de cada cliente, incluyendo encargos personalizados y opciones pensadas para intolerancias alimentarias. Cada creación busca emocionar y acompañar momentos importantes, manteniendo siempre el equilibrio entre tradición, calidad y estética.
Un oficio hecho de técnica y dedicación
Creemos en una repostería honesta, cercana y con identidad. Defendemos el valor de lo artesanal, de lo bien ejecutado y de los procesos que requieren tiempo. Cada decoración, cada textura y cada sabor reflejan nuestro compromiso con la calidad. Para nosotras, cada pedido es un proyecto donde confluyen la confianza, la creatividad y el cuidado por el detalle.
Elaboradas a medida según cada ocasión, con decoraciones clásicas, temáticas o fondant. Combinamos estética y sabor para ofrecer piezas únicas, adaptadas a las ideas y preferencias de cada cliente.
Recetas artesanas que mantienen viva la esencia de la repostería de siempre, elaboradas con materias primas de calidad y acabados cuidados. Sabores reconocibles, reinterpretados con la excelencia de un obrador actual
Desde galletas decoradas hasta cookies crujientes o suaves. Opciones ideales para eventos, detalles personalizados o pequeños momentos de disfrute.
Brownies, cupcakes, cakepops y otras elaboraciones pensadas para sorprender. Combinamos sabor, presentación y variedad, ofreciendo opciones versátiles tanto para regalar como para celebraciones.